Las Trufas Hollandia son una variedad desarrollada por productores holandeses en laboratorio para maximizar los niveles de potencia. Por lo tanto, su porcentaje de psilocibina es muy alto, alcanzando una puntuación de 4 sobre 5 en la mayoría de escalas científicas.
En primer lugar, cabe destacar que estas trufas se venden con propósitos ornamentales o de estudio micológico. Bajo ningún concepto son aptas para consumo humano.
Una ingesta accidental de estas trufas podría generar los siguientes efectos:
Alteración de la conciencia
Distorsiones visuales muy pronunciadas
Introspección y reflexiones filosóficas potenciadas
Aumento de la creatividad
Los efectos se podrán sentir 30 minutos después de su ingesta, alargándose en el tiempo hasta 6 horas.
Método de conservación
Las trufas pueden conservarse en su envase original sin abrir durante un mes en la nevera.
Una vez abierto, perderán sus propiedades en un máximo de 3 días.
Para conservarlas a largo plazo, secar las trufas. En este caso pueden durar alrededor de 2 años dentro de un recipiente hermético en un lugar fresco, seco y oscuro.
Es necesario recordar que las dosis de trufas secas y frescas son diferentes.
Contenido del paquete: 15 gramos de trufas Hollandia.
